Paris Saint Germain vs Tottenham Hotspur
Análisis y Explicación
La cuota me parece excesiva para el tipo de encuentro que se prevé. El Tottenham está inmerso en una transición profunda: nuevo entrenador y adiós a figuras clave como Heung Min Son. El cambio en el banquillo no es solo de nombres, sino de filosofía. Con Postecoglou veíamos un fútbol valiente, líneas adelantadas y marcajes individuales; ahora, con el técnico danés, la propuesta pasa por defender más cerca del área, cerrar espacios y dar protagonismo al bloque y a los jóvenes.
Las primeras actuaciones ya lo reflejan: un Tottenham con pocas ocasiones generadas, bien organizado atrás y sin la presión alta que mostraban antes. Esto favorecerá a un PSG que moverá la pelota con calma, buscando filtrar pases en lugar de entrar en intercambios físicos. No sería raro ver a los franceses con más del 70% de posesión y un arranque de partido muy cerrado. Además, los números de la temporada pasada respaldan la previsión de pocas infracciones: el Tottenham promedió 11,7 faltas por partido en la Premier, mientras que el PSG apenas 9,06 en la Ligue 1.
El propio Thomas Frank ha señalado a Kvaratskhelia como el mayor peligro, pero dejó claro que no pueden recurrir siempre a la infracción para detenerlo. El PSG, además, es un equipo que rara vez abusa de las faltas, ya que prioriza recuperar el balón por posicionamiento e interceptación más que por contacto.
El árbitro, João Pinheiro, es un factor a tener en cuenta: en Portugal su media de faltas es alta por el tipo de liga, pero en torneos europeos baja drásticamente, quedando en torno a 20 por encuentro.
En cuanto al contexto, el PSG no atraviesa su mejor momento: el caso Donnarumma y la preparación para el Mundial de Clubes afectan a la plantilla. El estado físico aún no es óptimo, lo que refuerza la idea de un planteamiento basado en el control y no en la intensidad. Todo apunta a un choque pausado, con pocos duelos y, por ende, un número bajo de faltas.